Iglesia Conventual del Santo Ángel
Carmelitas Descalzas de Sevilla

A finales de los años 40, bajo el pontificado mariano de Pío XII, que marcó lo que se denominó como la “Hora de María”, la Iglesia vivió un renacer en la devoción a la Virgen, especialmente con la proclamación del dogma de la Asunción en 1950. En este contexto, el padre Columbiano Gutiérrez, elegido Provincial de los carmelitas descalzos de Andalucía en 1948, decidió llevar a cabo un proyecto que había concebido durante mucho tiempo: la creación de una revista mariana propia de la orden. Tras su elección en el Capítulo Provincial celebrado en Córdoba, el padre Columbiano designó al padre Ismael Bengoechea de Santa Teresita como director de la futura publicación. El padre Ismael, quien había servido previamente como prior del convento de San Cayetano en Córdoba, se liberó de sus cargos para dedicarse a este nuevo proyecto.

El 11 de mayo de 1948, acompañado por el padre Columbiano, Ismael se trasladó a Sevilla, donde se establecería la sede de la revista. En los días siguientes, se presentó en la Vicesecretaría de Educación Popular, responsable de las publicaciones, y aseguró la colaboración con la Imprenta Zambrano, que se encargaría de la impresión. Así, en medio de un ambiente de creciente fervor mariano, se consolidó el proyecto de la revista, que sería un símbolo más de la devoción y del legado cultural del Carmen Descalzo en Andalucía.